La observo silenciosa con mi tasa de café humeante entre las manos
Un dejo de nostalgia se escapa en una lágrima que corre débilmente entre las cortinas
Las amarillas ramas sobre la madera marcan un tiempo fuera del tiempo
No logro retener el momento en que se marchitaron sus hojas.
Perdída la mirada en el reloj que pendula horas y minutos sobre aquella pared,
el amor,la infancia,la fe prendidas en los estantes oblicuos de su andar, retosan los recuerdos .
El invierno ha golpeado las puertas y ventanas sin sosiego
Sobre el cenicero un cigarro deja escapar su último aliento
Arropada de olvidos
el último sorbo del café tibio
borra menesterosa que predice mi destierro
Suspiro , me despido
El cuerpo se queja
La calle vacia
En mi alma un desierto
la arena dejó de marcar el tiempo
Autor : Lilian Raquel Costantino
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